QUIERO CONTAR UNA HISTORIA

Quiero contar una historia, dice Mabel, y es una historia que todos queremos contar, porque todos somos historia que hemos forjado día a día siendo protagonistas principales. En el todo, en el universo, están los mundos intercambiando sus paisajes y en ellos, su identidad se ha formado con alegrías, llantos, decisión, sensibilidad, fuerza y esperanza, todo junto a un elemento imprescindible: sueños. Es la característica del relato que involucra a la poesía y la narrativa en la autora también de "Pequeños relatos rimados", en los cuales refleja una pasión por las cosas que tienen la esencia de las cosas simples, porque justamente en su simpleza radica la verdadera importancia.
Toda historia merece ser contada y escuchada, y esta historia de la autora de las presentes páginas tiene toda la crónica de sucesos esenciales que dejan profundas huellas en el alma. Las páginas en las cuales se ha vertido el rocío de una fresca mañana del espíritu y el calor de su sol, tienen también la apacible serenidad del atardecer y las diademas de estrellas de una noche que invita a soñar. Quien oiga, encontrará fácilmente los atributos esenciales de su propia realidad y comprenderá a los personajes que habitan en ella porque no son ajenos a nuestra existencia.
Transmitir una historia lleva consigo el perfume de las vivencias, de los lugares, de los momentos, que en una profunda inspiración puede percibirse adentrándose en un viaje singular hacia el mundo de la evocación donde el punto de partida está en cualquier parte y el punto de llegada es un eterno devenir. Mabel tiene en su poder elementos que hacen vivas otras historias, cuya existencia algunos conocen, y otros que la ignoramos no podemos sustraernos a involucrarnos con ellas y a sensibilizarnos con el sentimiento en cualquier parte de sus páginas.
Contar una historia no es una fácil tarea, requiere un largo viaje en el cual plasmar los hechos exige una serenidad especial. Quienes ahondamos en los vericuetos de nuestra existencia no siempre recuperamos los elementos en forma serena y le damos un nuevo sentido sin una visible transformación. Por eso, en el caso de estas páginas, podemos observar la invariable esencia de ellos en cada espacio de tiempo y lugar; podemos escuchar atentamente cada episodio sin perder contacto con su íntima realidad; podemos viajar al interior de la crónica de nuestros días y tal vez, superando el peso de la misma, contar una historia.

Esteban Fauret

Mabel García de La Uz

Se dedicó a la docencia. Ejerció durante 30 años. De ellos 22 como Directora de la escuela rural Nº 51 del distrito de Pehuajó y los restantes como Inspectora de Primaria en los distritos de Carlos Tejedor, Daireaux, Henderson y Pehuajó. Su incursión en las letras comienza a partir de su retiro de la vida docente. Sus inicios fueron en el Grupo Literario "Acuarela". Luego, cuando surge la idea del Círculo de Escritores Pehuajenses, participó activamente en su formación como socio fundador e integrante de la Comisión Directiva, en la que continúa hasta el momento. Amante de la vida rural, sus actividades y su gente no podrían faltar en los temas de sus poesías, relatos o cuentos, eje central sobre el cual giran sus dos libros publicados: "Pequeños relatos rimados", totalmente en verso y "Quiero contar una historia" donde se asocian la poesía y la narrativa. Tuvo además participación en la primera y segunda antología del Círculo de Escritores Pehuajenses y en la antología de 7º Certamen Provincial de Los Toldos, con un trabajo mencionado en el Concurso Eleuterio Mariño (2009).

ISBN 978-987-656-111-2